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Se despertó y sacó ventaja

  • Matías Beccaglia
  • 5 jun 2017
  • 3 Min. de lectura

Boca aprovechó la caída de River y sacó una gran diferencia.

No era un fin de semana fácil para los xeneizes, teniendo en cuenta que River había ganado su partido pendiente vs Atlético Tucumán y había quedado a un punto, con la posibilidad de ponerse puntero hasta que juegue Boca. Sin embargo el millonario no tuvo un partido fácil y perdió vs San Lorenzo 2-1 en el Nuevo Gasometro. Esto le daba cierta tranquilidad al equipo de Guillermo. Pase lo que pase iba a seguir siendo único puntero y tenía la chance de estirar la diferencia con respecto a sus perseguidores. En frente tenía a Independiente, que venía invicto en el año, jugando un gran fútbol por momentos y compitiendo internacionalmente (el miércoles superó a Alianza Lima por la Sudamericana).

El xeneize no venía jugando bien y el dt tenía algunos problemas para armar el equipo. Para este partido decidió no hacer uso de el artículo 225 por Peruzzi y desplazó a Jara al lateral derecho. Centurión entrenó con el grupo durante toda la semana pero Guillermo decidió no arriesgarlo, por eso concentro pero ni siquiera fue al banco. En su lugar ingresó Junior Benitez. En cuanto al rojo, Holan realizó un solo cambio con respecto al equipo que ganó en Perú. Ingreso Walter Erviti en lugar de Nery Dominguez.

El partido comenzó de manera favorable para el local, que manejaba la pelota y tenía alguna chance clara con Pavón. Boca apretaba muy bien a los atacantes de Independiente y no los dejaba posicionarse mano a mano con los defensores. Otra virtud del xeneize fue robarle la pelota a Erviti y no permitir que saliera rápidamente con un contraataque. Pero con el paso de los minutos los jugadores del rojo fueron encontrando algunos espacios, principalmente Barco en la izquierda del ataque, sin embargo no lograba inquietar a Rossi y solo ingresaba al área mediante la pelota parada.

Boca era el mejor en el partido pero sin generar demasiado peligro. Hasta que en minuto 27 tras una buena jugada, Pérez recibe un planchazo de A. Franco dentro del área, lo cual deriva en penal para el local. De el mismo se hizo cargo Benedetto que cruzó el remate para que Campaña no pueda llegar a pesar de haber adivinado la punta. Así Boca se puso 1-0 y logró encontrar tranquilidad en el resultado. El partido se siguió desarrollando de la misma forma, muy disputado en la mitad de cancha y muy cortado por las faltas. Varios jugadores se cargaron de tarjetas amarillas. Y cuando parecía que así iba a terminar el primer tiempo, apareció Pavón por la izquierda desbordando a Bustos, enganchando y levantando un centro al segundo palo para la llegada de Benitez que concretó el 2-0 a favor del xeneize.

El segundo tiempo arrancó con un Independiente mucho mas despierto, que manejaba la pelota y arrinconaba al local que se refugiaba dentro del área. Tras varias combinaciones, el rojo logró rematar al arco mediante una buena jugada de Rigoni. Vale aclarar que el dt visitante decidió prescindir de su número 9, Gigliotti, para que ingrese Meza y así tener mas juego.

El partido se siguió desarrollando a favor de Independiente por razones obvias, debía ir en busca de un gol. Por eso llego varias veces al arco de Rossi, pero con remates de media distancia. En cambio Boca, esperaba mas retrasado y buscaba salir con la velocidad de sus delanteros.

En el minuto 74, Campaña rechaza con la mala fortuna de que la pelota rebote en Benedetto y derive en los pies de Junior Benitez, que hizo la pausa y asistió al 9 xeneize para que anote su doblete y se convierta en el único goleador del campeonato con 18 tantos.

Tras este gol el partido quedó totalmente definido. El rojo quedó rendido sin ideas, mientras que Boca mantenía la pelota en mitad de cancha sin atacar demasiado. Guillermo hasta se dio el gusto de sacar a Benedetto para que sea ovacionado y en su lugar ingresó Bou. Así terminó el partido, con Boca jugando un gran fútbol que hacía rato no mostraba y con un Independiente desconocido con respecto a los últimos partidos.

Con esta victoria, el xeneize llegó a los 56 puntos y sacó una diferencia de 4 sobre su principal perseguidor, River. A falta de tres fechas está todo dado para que Boca se consagre campeón, algo que parecía difícil hasta hace unas horas cuando todavía no habían jugado ninguno de los dos equipos.


 
 
 

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